La Jueza Federal
Servini de Cubría lo había citado a indagatoria el próximo jueves 8 de Enero. ¿Prófugo o desaparecido?
Por
Oscar Dufour |
Semanas
atrás, cuando la Jueza Federal Servini de Cubría decidió llamar a indagatoria a
Martín Lanatta, en el marco de la causa comúnmente denominada “triple crimen de
General Rodríguez”, comenzaba la puesta en marcha de un plan mafioso, para
evitar la declaración judicial de este delincuente alojado entonces en el penal
de máxima seguridad de General Alvear.
Los
Buenos Aires que se respiran desde el pasado 10 de Diciembre en nuestra querida
República Argentina, tan vapuleada por la sombra de una corrupción enquistada
por más de una década de gobierno kirchnerista, y de mafias con fuertes raíces
en el mundo político, hacen que el cimbronazo de este incidente, nos referimos
a la supuesta fuga de los hermanos Lanatta y de Schillaci, -si
bien es cierto que se fueron por la puerta principal del Penal y hay ribetes
“que no cierran”-; no solo no afecten la gobernabilidad de la gestión de María
Eugenia Vidal, y menos aún aunque mas no sea, tiendan una mínima sospecha en la
transparencia de sus actos, que es en esencia un ejercicio común y cotidiano.
Se
sabe “off de record” que Martín Lanatta estaba dispuesto a brindar ante Su Señoría
una amplia declaración, que no se limitaba al
asesinato de Forza, Bina y Ferrón, también iba a referir en detalle a la
denominada “mafia de los medicamentos”
con alcances insospechados en cuanto a nombres de los involucrados, y por
supuesto a la “estrella de las drogas sintéticas”, la efedrina.
La
“trama” por ahora se lleva puesta a la cúpula del Servicio Penitenciario de la
Provincia de Buenos Aires, donde con una firme y atinada decisión, la flamante
Gobernadora lo declaró en emergencia. Tampoco es menor la “sombra” que todavía
mantiene el ex Jefe policial Hugo
Matzkin, sobre todo en los municipios bonaerenses que gobierna La Cámpora;
aunque el poder que aún ostenta, se va a diluir con el paso de los días, ante
la acertada designación del Ministro de Seguridad Cristian Ritondo y del
Comisario General Pablo Bressi al frente de la Policía de la Provincia de
Buenos Aires, un profesional de excelencia que en tándem con su Ministro,
garantizan eficiencia para los difíciles tiempos que se avecinan.
La
disposición frontal de “avanzar con todo” de la Gobernadora Vidal, vuelve a
poner en el eje de la tormenta al ex Jefe de Gabinete Aníbal Fernández, que como es habitual en él, intentó sin éxito
“tirarle el paquete” a su rival de turno con argumentos carentes de sustento. Es
demasiada coincidencia, que quien lo incriminó tiempo atrás como es el caso de
Martín Lanatta, “desaparezca” días previos a ser indagado por la Jueza Servini
de Cubría. Es un “tufillo” que tiene de alguna manera, un matiz muy parecido a
lo ocurrido con el malogrado Fiscal de la Unidad especial AMIA Alberto Nisman.
Aunque en el “incidente” de la “fuga o desaparición” los ojos deberían estar
puestos sobre los hermanos Máximo y Miguel Zacarías.
Hay
nombres que en el ambiente judicial se repiten una y otra vez cuando el “crimen
organizado” deja estos últimos años su estela de muertos, ya sea en al ambiente
financiero o “político”, algunos son hombres que estas organizaciones utilizan
para sus fines espurios y luego descartan con total impunidad, otros continúan,
son nombres que no superan las tres o cuatro docenas de personas y todos se
conocen entre sí, algunos de ellos vinculados tangencialmente como Carlos Molinari, Miguel Angel Lamparelli y
Leonardo Fariña, este último desde su condición de recluso, con “fuerte
incidencia” en algún sector del Servicio Penitenciario Provincial.
En conclusión: La mafia mata, y
asi manda “su mensaje”, el móvil siempre es el dinero en todas sus variantes de
“lavado”, “narcolavado”, “mafia de los medicamentos” etc., y con ello cubrir
con un manto de silencio, la corrupción y la impunidad. ¿Será este el destino
de Martín Lanatta?
Buenos
Aires., Diciembre 29 de 2015.-

No hay comentarios:
Publicar un comentario